Pocos o nadie seguían el anterior blog, el llamado Petaca Charra. Luego, pocos o nadie echarán de menos aquellas dos entradas anteriores a esta, bajo el título de la Petaca.
La Petaca nació como un pequeño sueño, para ser un gran nombre de Peña. En mi opinión, era un nombre perfecto, para un colectivo de ámbito futbolístico y que lo que solían hacer, en muchas ocasiones, era tomarse unos lingotazos para sobrellevar algunos duros reveses por parte de su equipo. Era también un nombre cómico, ¿quién no se habría echado unas risas? Original (aunque después descubrí en el registro otra Peña llamada Petaca, de Pucela para mas inri, pero no tan chuli como la nuestra por llevar lo de Charra, que eso da caché). Y todo había surgido a partir de la introducción en el campo de ese objeto pequeño, metálico, llamado petaca (qué gran invento). No voy a revelar el nombre del miembro integrante de nuestro colectivo que la trajo a nosotros, para que no tenga problemas por meter esa clase de cosas en campos de fútbol.
Anyway, llegó el gran momento de formalizarnos, de pasar de ser un grupo de amigos(algo borrachillos, con cariño) a una peña en condiciones (algo borrachilla, pero con cariño). Nos movimos, buscamos los papeles que necesitábamos para ser una ASOCIACIÓN con todas las letras. Y entonces nos tocó darle nombre. Yo en seguida puse en la mesa el de LA PETACA CHARRA. Algunos parecieron al principio engatusados y embriagados con el dinamismo que conllevaba. Pero de pronto, alguien (guiño al presi) vio el futuro: si dentro de 20 años, con hijos y todo, seguimos llamándonos así, ¿qué van a pensar de nosotros? Grrrrrr (mi frustración) Todos empezaron: "es verdad", "debemos ser serios"... No se porque se avergonzaron de llamarse así, meses después seguirían siendo borrachillos en campos de fútbol ajenos, en los desplazamientos, pero... Con un nombre serio...
El caso es que La Petaca perdió la jugada y con ella se llevó a otro posible candidato LOS BOCHARROS. Y entre otros candidatos más solemnes y menos alcohólicos surgió FURIA UNIONISTA. Y por eso este blog, que a veces escribo y a veces se me olvida, debe cambiar su título.
Meses después de la última entrada, volví a ver a mi Petaca, de la cual me despido para siempre y dedicaré el resto de mis letras a Furia Unionista. Eso sí, cuando pasen los años y seamos padres solemnes con una peña con un nombre serio y comprometido, espero que se cree la sección: Biberón Charro, como un pequeño homenaje a la Petaca olvidada.
La Petaca nació como un pequeño sueño, para ser un gran nombre de Peña. En mi opinión, era un nombre perfecto, para un colectivo de ámbito futbolístico y que lo que solían hacer, en muchas ocasiones, era tomarse unos lingotazos para sobrellevar algunos duros reveses por parte de su equipo. Era también un nombre cómico, ¿quién no se habría echado unas risas? Original (aunque después descubrí en el registro otra Peña llamada Petaca, de Pucela para mas inri, pero no tan chuli como la nuestra por llevar lo de Charra, que eso da caché). Y todo había surgido a partir de la introducción en el campo de ese objeto pequeño, metálico, llamado petaca (qué gran invento). No voy a revelar el nombre del miembro integrante de nuestro colectivo que la trajo a nosotros, para que no tenga problemas por meter esa clase de cosas en campos de fútbol.
Anyway, llegó el gran momento de formalizarnos, de pasar de ser un grupo de amigos(algo borrachillos, con cariño) a una peña en condiciones (algo borrachilla, pero con cariño). Nos movimos, buscamos los papeles que necesitábamos para ser una ASOCIACIÓN con todas las letras. Y entonces nos tocó darle nombre. Yo en seguida puse en la mesa el de LA PETACA CHARRA. Algunos parecieron al principio engatusados y embriagados con el dinamismo que conllevaba. Pero de pronto, alguien (guiño al presi) vio el futuro: si dentro de 20 años, con hijos y todo, seguimos llamándonos así, ¿qué van a pensar de nosotros? Grrrrrr (mi frustración) Todos empezaron: "es verdad", "debemos ser serios"... No se porque se avergonzaron de llamarse así, meses después seguirían siendo borrachillos en campos de fútbol ajenos, en los desplazamientos, pero... Con un nombre serio...
El caso es que La Petaca perdió la jugada y con ella se llevó a otro posible candidato LOS BOCHARROS. Y entre otros candidatos más solemnes y menos alcohólicos surgió FURIA UNIONISTA. Y por eso este blog, que a veces escribo y a veces se me olvida, debe cambiar su título.
Meses después de la última entrada, volví a ver a mi Petaca, de la cual me despido para siempre y dedicaré el resto de mis letras a Furia Unionista. Eso sí, cuando pasen los años y seamos padres solemnes con una peña con un nombre serio y comprometido, espero que se cree la sección: Biberón Charro, como un pequeño homenaje a la Petaca olvidada.
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